martes, 30 de agosto de 2011

Porque Adele es mucho Adele



Porque me encanta su voz...

Porque me gusta que salga de lo común...

Porque hace sus propias canciones...

Porque ha conseguido salir adelante con un estilo propio...

Porque sus canciones me llegan...

Porque no necesita más que un piano para ponerme la piel de gallina...

Porque si le gustan unas uñas postizas horribles le da igual ponérselas...

Porque expresa como nadie las cosas más comunes...


Y porque no puedo parar de escuchar esta canción...





Sí, Adele consigue ablandar mi rancio corazón.



Besos!!

viernes, 26 de agosto de 2011

Deseando un PS1...

Y sin darme cuenta ya he vuelto a caer. Suficiente con ver una foto, para acordarme de cuanto me gusta y cuanto lo deseo.











Es verdad que si me tocara la lotería no es el primer bolso que compraría (2.55 está antes) y quizá tampoco el segundo (Donna de Prada o el de Sofia Coppola para LV)... y sin embargo me vuelve loca.

El año pasado ya me dio un arrebato parecido... me pasaba horas mirando clons en Asos y esperando (con poca esperanza) algún chollo en Ebay del que solo yo me diera cuenta. 

Con el tiempo, centré mis esfuerzos en el Old Skool de Su-Shi y después de algunos meses lo conseguí para mi cumpleaños. Ahora que lo tengo colgado en mi habitación, me saca una sonrisa cada vez que lo miro. También me encanta.

Pero el PS1 es otra cosa, es la necesidad de lo inalcanzable. Soñar con el tacto que tendrá... con el olor... y sentirse una Olsen por llevarlo. Para nada me conformaría con el clon casi exacto de Salvador Bachiller.

Ay! (suspiro profundo), que se sentirá pudiendo entrar en la tienda online de Barneys un día cualquiera y poder comprártelo en el color que te apetezca en el momento (suspiro again).


Entre suspiros me quedo soñando con ese momento.



Besos!!

miércoles, 24 de agosto de 2011

Cómo saludar a un chico en 10 días

El otro día en twitter el hashtag (palabra que se utiliza con una almoadilla delante para aunar todos los twits que lo conlleven) #cinevasco fue TT (Trend Topic, Tema del Momento) durante casi todo un día.

El juego era amoldar títulos de películas a la sociedad vasca. La gente se lució mucho con creaciones tan buenas como "Temina Aitor", "20.000 leguas de viaje submarino (a pulmon)", "Poteando con Miss Daisy", "Irma la borde", "El código Txillida", "Black Hawk levantado", "Lo que el peine del viento se llevó", "Los caballeros prefieren alubias"... un largo etcétera. Vamos, que me lo pasé teta.

Alguna de mis aportaciones fueron "Joxean's Eleven" o "Con abarcas y a lo loco".

Pero después de haber pasado toda la Semana Grande y dos días de reflexión, me di cuenta que sin duda con el que más me lucí fue con "Como saludar a un chico en 10 días".




A los que no sois de aquí, os costará entenderlo, pero lo de hablarle al chico que te gusta no suele entrar en nuestros planes. Y menos en un tiempo tan reducido.

Primer día: Tú fichas a un chico. Se lo cuentas a todas tus amigas y oficialmente es tuyo. Hasta ahí todo bien. Luego es cuando llega la gran aventura.

Segundo día: Primer bar, no está. Segundo bar, no está. Tercer bar, bingo. Al lado de la barra y hablando con una chica. ¿Quién será esa cochina que osa hablar con tu hombre? Después de veinte minutos sin quitar ojo, empiezas a percibir cientos rasgos parecidos: ¿hermana? ¿prima? Piensas en eso y te vas más tranquila a casa.

Tercer día: Primer bar, no está. Segundo bar, parece que sí y en la cola del baño. Esta es tu oportunidad. Te pones al lado de él. Mientras rezas para que los que están delante de vosotros tarden mucho más del tiempo necesario, te mira. Intentando superar la presión del momento le dibujas en tu cara la mejor de tus sonrisas. Mierda, eso parecía un tick. Pasa al baño. Vas tú detrás de él y os rozáis. ¿Un roce? Bienn!! Aquí hay futuro. Sales del baño y ya no hay ni rastro.

Cuarto día: Primer bar, no está. Segundo bar, no está. Tercer bar, no está. Seguro que hay ha hecho descanso y yo aquí muerta de cansancio solo por verle.

Quinto día: A la primera de cambio te lo cruzas. Le miras. Tiene que acordarse de ti del otro día en la cola del baño. Pasa totalmente de largo. Pues parece que no. Menudo bajón. A casa que te vas.

Sexto día: Primer bar, nada. Segundo bar, nada. Tercer bar, nada. Hoy tiene que estar que es el día grande. Cuarto bar, nada. ¿Y si les digo a mis amigas para separarnos y así rastrear mejor? Si ellas están absolutamente igual. Quinto bar, siiiiiiiiiii!! Y parece que está un poco piripi. Está es la tuya. Pero de repente se le pone una mala cara increíble y sale corriendo del bar.

Séptimo día: En el primer bar que entro veo a todos sus amigos y él no está. Ya está. Me puedo ir a casa.

Octavo día: Primer bar, no está. Segundo bar, no está. Pero entre el segundo y el tercero me lo cruzo. Que hago, que hago, ¡qué hago! Piensa rápido. ¿Que se me caiga el bolso? Que asco el suelo está hecho una mierda. ¿Me caigo yo? Aún peor. De estas que me atraganto con el trago y empiezo a toser como una idiota. Pero me mira!! ¿Esto será positivo o negativo?

Noveno día: ¡No me lo puedo creer! ¡Hoy es mi día de suerte! Está hablando con el pesado de mi clase que siempre intento evitar. ¿De qué se conocerán? Realmente me da igual y decido que es un buen momento para hacerse la simpática con el pesado. Llego saludo, me miran y se despiden. Se ha ido. Y ahora me toca aguantar al otro.

Décimo día: Primer bar, nada. Segundo bar, nada. Tercer bar, nada y decido ahogar mis penas en el alcohol. Cuarto bar, nada. Quinto bar, apenas distingo quien está al lado mío. Pero espera, esta cara me suena. ¿Es él? Ay que creo que sí. Y sin ser totalmente consciente de la importancia del momento, empiezo a mover la cabeza en lo que parece ser un saludo. ¿Habré sido realmente capaz? Parece que sí porque en mitad de toda esa neblina que tengo enfrente lo veo repitiendo mi mismo gesto antes de irse.


Y esto es todo amigos. No es autobiográfico pero podría serlo. Diez días y si hay suerte.

Teniendo en cuenta que en la Semana Grande y en los días previos y sucesivos a ésta las juergas suelen ser bastante seguidas el proceso no suele ser tan largo. Pero imaginaros lo mismo en invierno cuando como mucho sales cada dos semanas porque con el tiempo que hace te apetece mucho más quedarte en casa viendo una peli. Pues el asunto se eterniza bastante.

Pero así somos y así estamos felices. Otro día os contaré la indignación que sentimos cuando a la primera de cambio te viene un chico a hablar. ¡Qué desfachatez!



Besos!!


sábado, 13 de agosto de 2011

Quiero esto, esto y esto

Una amiga se ha ido a NY de vacaciones. Cuando me lo comentó lo primero que me vino a la cabeza fue: ¿qué le digo que me traiga de allí?




Mis pensamientos fueron en dos direcciones. Uno, algún producto de Nars. Dos, unas Converse amarillas que me tienen loca desde que se las vi a Macarena.

Y aunque es una gran ocasión para aprovechar porque ambas cosas están más baratas allí que aquí, mi lado racional se impuso para dictaminar que no tengo necesidad de ninguna de las dos cosas. Necesidad, ni dinero de sobra, para qué engañarnos.

Pero ahora se me presenta el mismo dilema con una variante que marca la diferencia: mi madre se va a Londres la semana que viene.




La diferencia claro está es que lo que me traiga ella de allí no lo tendré que pagar yo. Y estas ocasiones sí que no hay que desperdiciar.

El problema es que no se me ocurre nada. Perfumes ya tengo. En maquillaje también estoy servida. Ropa no me arriesgo porque si me queda mal a ver luego cómo lo cambio. Y los bolsos que tengo fichados (2.55, PS1, Donna...) no creo que allí sean una ganga.

Lo ideal sería poder teletransportarme un día para decir "esto, esto y esto". O tampoco hubiera estado mal que me hubiera llevado con ella, pero eso tampoco es posible a estas alturas.


¿Se os ocurre algo para pedir?


Besos!!

jueves, 11 de agosto de 2011

Buscando el libro del verano

Hoy también entre libros anda el juego.

Tal y como comenté en la última entrada, estos días ando de lectora compulsiva. Sin embargo, me ha surgido un gran problema: se me está pasando el verano sin encontrar el libro perfecto.

El verano pasado el listón quedó bastante alto con Jane Eyre. Al final me lo leí en unos pocos días y fue un libro que disfruté muchísimo, hasta diría que se ha convertido en mi favorito. Aún recuerdo esos momentos que pasé con él en aquellas mañanas calurosas.

Las dos lecturas más importantes de estos días están siendo "Nosotros los ahogados" y "El jardín olvidado". También me estoy leyendo "El amor de mi vida" de Rosa Montero, una colección de artículos sobre sus lecturas imprescindibles, y me está gustando un montón (lo recomiendo a cualquier amante de los libros) pero no es una de estas historias épicas que te marca. Los otros dos son novelones. "Nosotros los ahogados" es uno de los libros más bien escritos que he leído en la vida pero la temática es algo cruda y a veces da un poco de pereza ponerte. "El jardín olvidado" es una historia interesante, pero no me despierta ninguna ansia por leerla.

Estoy algo exigente, lo reconozco.

Aunque tampoco ayuda que en la cama de al lado tu hermana esté leyendo "La chica que soñaba una cerilla y un bidón de gasolina". Y aún le queda la tercera parte por disfrutar. Pero que envidia. Ella enganchada a su lectura totalmente aislada del mundo y yo pasando le libro a libro sin encajar en ninguno. Lo que daría por que me resetearan el cerebro y poder descubrir otra vez la trilogía Millenium.




Y en busca de una historia que me tire estoy yendo a lo fácil: la novela romántica. Pero aquí también me vuelvo algo pedigüeña. Me gustan las historias algo creíbles, por lo menos que me las crea yo. Mi escritora favorita del mundo mundial en esta temática es Rachel Gibson. Reconozco que sus libros no son lo más verosímiles que he leído pero me hacen reír y alguna vez hasta llorar. Tiene el don de meterme de lleno en la historia de la manera que no lo consigue ninguna otra. El problema está en qué ya me he leído todos los sus libros que están publicados en España. De hecho, los tengo todos en casa (bueno, algunos los presté y no me los han devuelto... si alguna se da por aludida ya sabe) y estoy a punto de ponerme a releer alguno. Hasta este punto ha llegado mi desesperación.

La otra noche me puse a buscar en una web especializada alguna novela romántica con buenas críticas de las lectoras. Pero después de ver que "El vizconde que me amó" estaba entre las más recomendadas me eché un poco para atrás. Tampoco es eso, ¿no?

Hoy he ido a la biblioteca con una lista de escritoras posibles que he confeccionado y para mi desgracia no había ningún libro de ninguna de ellas. Para salir del paso he cogido "Suma y sigue" de Toni Jordan. No tiene mala pinta pero no creo que me vaya a marcar demasiado.

Y vosotros, ¿tenéis recomendaciones de esas que te enganchan la primera página y lo sueltas hasta la última?



Besos desesperados!

martes, 2 de agosto de 2011

Ahí va esa joven tan extravagante...

Cual Bella me hallo estos días inmersa en las más variadas lecturas.




Tal cual. No me apetece otra cosa que leer, leer y leer. Será la sensación de que cuando agosto se acabe ya no tendré en tiempo suficiente para ello y entonces ahora necesito hacerlo compulsivamente.

Además, mañana me voy a la pequeña aldea perfecta para ello. No tiene bibliotecario ni biblioteca, pero tampoco lo necesito porque voy cargada con todo tipo de lectura para cualquier momento y antojo.

Me pondría a cantar pero casi que os lo evito... (el original aquí)


Un beso y disfrutar con vuestras lecturas!